Así es la hamburguesa más cara del mundo: cuesta más de cinco mil dólares

Sí, es de verdad. Sí, se come. Y sí, cuesta exactamente 5 mil 891 dólares. Se trata de la hamburguesa más cara del mundo y el primer cliente que la ha comprado no la ha expuesto en una vitrina ni la ha donado a un museo ni la ha degustado con cubiertos de plata: se la ha comido con las manos, como se hace con cualquier hamburguesa.

El autor de tan exclusivo plato es Robbert Jan de Veen, chef de un restaurante neerlandés llamado De Daltons que está ubicado en una aldea del municipio de Barneveld llamada Voorthuizen.

El nombre de este plato estrella es Golden Boy y cuenta con ingredientes de primerísima calidad, incluyendo carne de Wagyu 100%, caviar beluga, cangrejo real de Alaska, paleta ibérica española o trufa blanca. La salsa barbacoa está elaborada con café Kopi Luwak (el café más caro del mundo, obtenido de deposiciones de civeta) y whisky escocés Macallan. La masa del pan contiene champán Dom Pérignon. Finalmente, la hamburguesa se cubre con pan de oro y se ahúma brevemente con humo impregnado de whisky.

Pese a que da la sensación de que simplemente se han cogido los ingredientes más caros del mundo y se han mezclado sin ton ni son, el autor de la Golden Boy asegura haber dedicado cinco meses a perfeccionar la receta, a lo que hay que sumarle las nueve horas de mimosa preparación del menú. Rober Willemse, presidente de la Royal Dutch Food and Beverage Association, es de momento el primer y único afortunado que ha podido degustarla y ha afirmado que los ingredientes se complementan perfectamente entre ellos.

Cabe preguntarse cuáles son las razones que han movido a un chef a crear un producto de ultra lujo en plena pandemia mundial y la respuesta se encuentra precisamente ahí. Según cuenta de Veen, la crisis global le produjo un sentimiento de profunda depresión y decidió crear esta hamburguesa para echar una mano al mundo: se trata de una acción solidaria en la que los ingresos se han destinado íntegramente a asociaciones benéficas.

Además, con su Golden Boy el chef puede llegar a cumplir un sueño de su infancia: entrar oficialmente en el Libro Guinness de los Récords. El récord está aún en fase de revisión, pero parece que se hará oficial ya que supera el precio de la anterior hamburguesa más cara del mundo, vendida en 2011 por unos 4,948.60 dólares.

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